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jueves, 16 de julio de 2020

USEA - Claves para una monta de cross segura - Cap. I/2 “La quinta pata” - 28JUN2020


William Micklem
Cap. I/1
Cap. I/2
“La quinta pata”
USEA

Claves para una monta de cross segura

Traducción adaptada: LM

Cap. I/2
“La quinta pata”

Entrenando la quinta pata
¿Qué es el entrenar la quinta pata? Es enseñar al caballo a usar su cerebro y a que asuma su responsabilidad al saltar porque es vital para su seguridad. Si tu caballo mira lo que salta, corrige instintivamente su velocidad y su tranco al acercarse demasiado o llegar demasiado lejos a un obstáculo, o recupera su equilibrio cuando resbala o tropieza, entonces se puede decir que tienen una "quinta pata". Todos los caballos deben tener un "entrenamiento de la quinta pata" como parte de ...



... su preparación integral del cross. Esto se descuida regularmente en el entrenamiento de caballos de completo a pesar de su evidente necesidad. Si quieres seguridad en el cross, entrena la capacidad de tu caballo de cuidarse a sí mismo. La recompensa es que ello te permitirá un margen de error.

Fotografía:

Mike McNally
Se puede enseñar a un caballo a desarrollar esa capacidad. En la doma y el salto, el entrenamiento de los caballos debe buscar la relajación, el auto-sostenimiento y la confianza para resolver ciertas situaciones. El uso de laboratorios de barras con riendas más largas con variedad de obstáculos, terrenos y velocidades ayudan al entrenamiento de la quinta pata. Algunos caballos no son cuidadosos simplemente porque están pendientes demasiado de un jinete que es demasiado exigente y los monta demasiado. Es importante no considerar el cross como algo que exige montar con gran fuerza cerca de los obstáculos, debes sentarte lo más quieto posible. Si el jinete distrae a su caballo o lo monta de forma mecánica, habrá mayor riesgo de accidente. El tema es poner al caballo "en acción" de forma muy positiva para permitir que ellos cuiden el obstáculo, así como en confiar en ellos tomen las decisiones correctas en tu nombre.

La clave del "entrenamiento de la quinta pata" es trabajar en el auto-sostenimiento de tu caballo. A muchos jinetes les resulta difícil permitir que el caballo encuentre su propio equilibrio. Es muy tentador tratar de equilibrar al caballo con el contacto pero, aparte de darle al caballo la dirección y velocidad correctas, es difícil hacer otra cosa con ese contacto. Disminuir la velocidad conseguirá un mejor equilibrio, pero no se puede lograr eso tirando de las riendas. Si estas sentado encima de un tejado que está cayendo, tirar con fuerza de un lado no consigue ninguna diferencia en su movimiento de caída, pues lo mismo se aplica al caballo. Es el caballo quien lleva al jinete y no al revés, por lo que los tirones realmente no harán nada más que cambiar la dirección o reducir la velocidad del caballo.

Historia de un ejemplo
Una alumna mía, Sarah, compró una yegua joven llamada Glen Shira que parecía tener una quinta pata natural y un buen entusiasmo por su trabajo, ¡posiblemente en exceso! La montó durante tres meses con éxito y luego se fue a Australia durante tres meses. Mientras Sarah estaba ausente, convino que Glen Shira la montara un jinete competente y experimentado para así continuar la educación de la yegua. Este enseñó a Glen Shira a escuchar las ayudas precisas del jinete y a saltar muy bien. Desafortunadamente, en ese proceso, la yegua dejó de pensar por sí misma.

Cuando Sarah volvió, llevó a Glen Shira a un pequeño entrenamiento de cross casi de inmediato, error número uno. En la pista de ensayo y antes de empezar se dio cuenta que la yegua era un caballo muy diferente ahora y siempre esperaba instrucciones delante de los obstáculos.. Resultó que a mitad del recorrido, llegó a obstáculo mal y Sarah se quedó muy quieta para que se las arreglara. En el pasado, ella habría leído esa situación y se las habría arreglado sin dificultad dando un tranco corto mas o, más probablemente, alargándolos para saltar. En cambio, trepó por el obstáculo y depositó a Sarah en el suelo con una clavícula rota.

Después de que Sarah se recuperara, Glen Shira regresó a las clases y volvió a aprender a usar su quinta pata. Juntos formaron una gran conjunto y finalmente fueron seleccionados para los Juegos Olímpicos de Barcelona, ​​a pesar de que Sarah era poco más que una amazona de fin de semana. Esto nunca podría haber sucedido sin el entrenamiento de quinta pata.


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